Para ti Pollito, que lograste, no sin esfuerzo, hacerme ver la magia de las personas.
Para ti, que intentaste, con más esfuerzo aún, que mirara lo bueno de la gente. Que viera debajo de su coraza y no me quedara con las primeras impresiones. Los peores son los que más ayuda necesitan.
Para ti, que me enseñaste a quererme y a quererte.
Para ti, que me enseñaste a recordar y a no olvidar jamás. Acuérdate del primer día de instituto. 2º de la E.S.O. Un día nublado. No nos habíamos visto nunca. Te acercaste nervioso a mí y me preguntaste: "¿Te gustan los días nublados?" mirándome a los ojos. Yo te contesté mal y te dejé ahí plantado esperando conversación por mi parte, pero tu no te rendiste. Nunca lo haces. Al día siguiente volviste a hablarme con el mismo resultado. Y al siguiente. Y al siguiente. Hasta que pensé que no habría nada malo en intentarlo.
Para ti, que me enseñaste a recordar y a no olvidar jamás. Acuérdate del primer día de instituto. 2º de la E.S.O. Un día nublado. No nos habíamos visto nunca. Te acercaste nervioso a mí y me preguntaste: "¿Te gustan los días nublados?" mirándome a los ojos. Yo te contesté mal y te dejé ahí plantado esperando conversación por mi parte, pero tu no te rendiste. Nunca lo haces. Al día siguiente volviste a hablarme con el mismo resultado. Y al siguiente. Y al siguiente. Hasta que pensé que no habría nada malo en intentarlo.
Para ti, que encontraste en mí la chica que necesitabas.
Para ti, que descubrimos juntos horizontes lejanos.
Para ti, que me enseñaste lo mágico de un amanecer en la playa.
Para ti, que me enseñaste a mirar siempre hacia delante y nunca hacia atrás.
Para ti, que siempre has respetado, aceptado sin rechistar, sin un solo comentario y sin una mala cara mis negativas hacia una relación que no sea de amistad. Tu sabes que no podría ser. Nos haríamos mucho daño.
Para ti, que me hiciste partícipe de tu mundo de sueños. Y me enseñaste a hablar su lenguaje.
Para ti, que me hiciste comprender que la vida es lo más importante que tenemos las personas. Más allá del dolor, de la tristeza, del miedo. Aunque un día se acabe. Por eso con más motivo.
Para ti, que me enseñaste a intentarlo...y a conseguirlo. A no darme por vencida. A luchar por lo que se quiere.
Para ti, que me enseñaste a llorar y reír en igual medida. A llorar de felicidad y a reír estando triste.
Para ti, que me diste todo cuanto tenías. Tu amistad.
Gracias.
Te quiero.
Disfrútala como yo la estoy disfrutando.
Para ti, que descubrimos juntos horizontes lejanos.
Para ti, que me enseñaste lo mágico de un amanecer en la playa.
Para ti, que me enseñaste a mirar siempre hacia delante y nunca hacia atrás.
Para ti, que siempre has respetado, aceptado sin rechistar, sin un solo comentario y sin una mala cara mis negativas hacia una relación que no sea de amistad. Tu sabes que no podría ser. Nos haríamos mucho daño.
Para ti, que me hiciste partícipe de tu mundo de sueños. Y me enseñaste a hablar su lenguaje.
Para ti, que me hiciste comprender que la vida es lo más importante que tenemos las personas. Más allá del dolor, de la tristeza, del miedo. Aunque un día se acabe. Por eso con más motivo.
Para ti, que me enseñaste a intentarlo...y a conseguirlo. A no darme por vencida. A luchar por lo que se quiere.
Para ti, que me enseñaste a llorar y reír en igual medida. A llorar de felicidad y a reír estando triste.
Para ti, que me diste todo cuanto tenías. Tu amistad.
Gracias.
Te quiero.
Disfrútala como yo la estoy disfrutando.
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